¿Qué son las sentadillas Qigong?

 

Las sentadillas pueden ser una herramienta muy poderosa para apoyar tu salud y fortalecer tu cuerpo y tu mente. Las sentadillas de Qigong pueden utilizarse para obtener calma interior, fortalecer el cuerpo y centrar la mente. Comprueba cómo esta antigua práctica también funciona como un remedio casero bien probado en la vida familiar cotidiana:

Wuál es la diferencia entre una sentadilla y una sentadilla de Qigong?

¿Por qué son tan beneficiosas las sentadillas?

Hacer que estas sentadillas de Qigong formen parte de una práctica diaria puede ser muy beneficioso, ¡y merece la pena volver a la clase de gimnasia! Se utilizan como una poderosa herramienta para fortalecer el cuerpo y la mente en diversas disciplinas como el Yoga y otros deportes. Los chinos consideran desde hace mucho tiempo que las sentadillas son un ejercicio indispensable para mantener abiertos los canales Qi de la columna vertebral y la región lumbar y sus alrededores. De hecho, casi pueden utilizarse como una forma de reconectar la conciencia con el cuerpo, lo que a su vez ayuda a reconectar con él y a fortalecerlo. Qi (fuerza vital/energía) y Shen (mente/conciencia). Cuando se hacen con la intención adecuada, las sentadillas se convierten en una especie de meditación andante “en el sitio”. Muy metódico y muy natural…..

 

¿Cómo ponerse en cuclillas?

Tras semanas de centrarme en el movimiento, intentando ejecutar el método a la perfección (mientras luchaba contra las expectativas de cómo se suponía que debía ser, junto con algunas molestias físicas), me di cuenta de que mis esfuerzos sólo me llevaban hasta cierto punto. Tenía la sensación de que me faltaba algo esencial en esta práctica aparentemente sencilla. ¿Dónde estaba esa gracia que había visto exhibir a los demás? Simplemente no sentía la conexión… parecía robótico.

Entonces me di cuenta de que estaba ignorando por completo el componente vital del Qi. Duh. Teniendo en cuenta que Qigong significa literalmente “trabajar con el Qi”, es lógico que el Qi sea un factor clave en todas las prácticas… no sólo en algunas de ellas. ¡No me extraña que no hubiera fluidez ni gracia! Me concentraba en mis limitaciones e intentaba presionarme desde un lugar de “logro” en lugar de conectar con la práctica desde un lugar de paciencia y facilidad.

 

Cómo superar la fase inicial de “¡no puedo hacerlo!

Empecé a hacer caso del dicho “el Qi fluye hacia donde va la mente” y experimenté con mantener la mente en la conexión con el Qi y su movimiento en el cuerpo, en lugar de en lo que hacía mi cuerpo. Busqué cambios y anoté retos, pero dejé de dejarme atrapar por ninguno de ellos. En cuanto mi mente divagaba, me anclaba en el Baihui (punto situado en la parte superior de la cabeza) o en el Dantian Inferior (centro de energía situado en la parte inferior del abdomen). Eso actuó como un imán y pude volver a centrar suavemente mi atención en el Qi, sin dejar que la incomodidad o la distracción se apoderaran de mí.

Fue entonces cuando las cosas empezaron a fluir….

Con una ligera concentración en el Dantian inferior, empecé a imaginar el Qi fluyendo desde encima de mi cabeza a través del centro de mi cuerpo (como un poste de carrusel) recorriéndolo hasta la parte inferior de mi columna mientras bajaba hasta el suelo. Centrándome en Baihui, imaginé el Qi moviéndose desde debajo de mis pies, de vuelta a ese poste, con el centro de atención encima de mi cabeza mientras me desenrollaba. Los movimientos se hicieron sin esfuerzo y el movimiento arriba/abajo se convirtió en un metrónomo, que mantenía mi mente bajo control mientras mi cuerpo se abría y se disolvía sin restricciones. Ahora, cuando estoy realmente en la zona, ni siquiera soy consciente de iniciar el movimiento: ¡he encontrado esa escurridiza gracia hipnótica que había estado buscando!

Las sentadillas se han convertido en una gran herramienta para ayudarme a moverme a través de diferentes capas en mi conciencia. Inicialmente, paso por la conciencia de que mi mente está dispersa, a la conciencia de los dolores y molestias de mi cuerpo y, finalmente, a la conciencia de ser algo más que un cuerpo y de unificar plenamente el Jing (cuerpo), el Qi (energía) y el Shen (mente).

 

Practicar sentadillas durante el día puede hacer milagros

Ahora utilizo las sentadillas de Qigong durante el día como un estímulo rápido. Si he estado sentado demasiado tiempo (¡gracias, pandemia 2020!) las sentadillas son una solución perfecta. De 10 a 15 minutos de sentadillas me ayudan a aliviar la tensión de los hombros y la parte baja de la espalda, y me siento con más energía y más centrada y enraizada al terminar.

¿Quieres saber más?

Las sentadillas son más seguras y eficaces cuando se utilizan como complemento de los métodos básicos de Yuan Qigong. Son una práctica complementaria maravillosa e. g. antes de hacer DI YUAN – la forma Yuan Qigong de pie. Las sentadillas pueden tener un efecto muy poderoso en tu cuerpo, Qi y mente. Por motivos de seguridad, te recomendamos encarecidamente que no hagas sentadillas de Qigong sin la orientación adecuada de un profesor de Qigong Yuan cualificado, sobre todo si estás embarazada o tienes lesiones. Para las personas mayores, se recomienda aprender y hacer sentadillas con un profesor y, si es necesario, utilizar una silla como ayuda para mantener el equilibrio.

Las Sentadillas Qigong se enseñan adecuadamente como práctica adicional en el segundo método de nuestro Programa de Aprendizaje en Casa:
Di Yuan – Nutrir el Qi.

 

¡Únete a la comunidad REN XUE y empieza a practicar Yuan Qigong!